09 Jun Óscar Fernández Orengo retrata su visión de los cineastas

Primer retrato panorámico de la serie sobre cineastas españoles titulada ” A través de mis ojos “. La idea de sumergir a Agustí Villaronga en la bañera de su casa fue de Óscar, pero fue imprescindible que a él le agradara su propuesta.

Tus fotografías no son encargos, fotografiar a cineastas es algo que haces tu porqué te gusta. ¿Cómo consigues contactar con ellos y fotografiarlos?

Contactar con los cineastas se ha producido de una forma bastante natural aunque el inicio de este proyecto no fue precisamente fácil . El encargo fotográfico para realizar el cartel de la película “ El Mar “ de Agustí Villaronga fue una ocasión perfecta para conocerle y proponerle que se dejara retratar por mi. El resultado óptimo de nuestra sesión fotográfica me animó a seguir retratando a más cineastas, Agustí me facilitó algunos contactos, también tuve la suerte de que algunos de mis amigos tenían amistad con algún que otro cineasta. Una vez te introduces en el mundillo del cine todo se agiliza. Por supuesto es importante que les agrade tu proyecto para que depositen su confianza en ti, también es fundamental armarse de paciencia. Después de 15 años retratando cineastas , a día de hoy tan sólo es cuestión de que el cineasta elegido tenga un día libre para recibirte.

Retratas cineastas fuera de su ámbito laboral, buscas espacios cotidianos. ¿qué es lo que te lleva a retratarlos en esos espacios?

Los espacios o lugares donde retrato a los cineastas son escogidos por ellos mismos por alguna razón personal propia, lo que pretendo con esto es que ese escenario propuesto enriquezca la elaboración final del retrato y potencie su pretendido valor documental. Siempre digo que las personas como los espacios cambian, mutan o desaparecen. La vinculación entre el personaje y su espacio para mi es fundamental, de hecho es una de las características principales de este proyecto.

¿De dónde surge la idea de fotografiar a cineastas?

La idea surge de mi amor confeso por el cine desde que era un niño, cuando estudiaba fotografía de los varios géneros que conforma este arte, el retrato era el que más me interesaba, siempre tuve la intuición de que acabaría vinculando mi fotografía al cine. Por otro lado nadie hasta ahora se había propuesto documentar con una cámara fotográfica de una manera exhaustiva y hasta en cierto modo obsesiva la existencia de tantos cineastas españoles e iberoamericanos. Fue como una aparición o una señal, tuve conciencia en ese preciso momento que tenía una misión en este mundo.

Empezaste compaginando el trabajo de fotógrafo con el trabajo de un bar donde trabajabas. ¿Cómo fue esa época?

Fue una época muy importante y decisiva en mi vida , había dejado de estar vinculado al estudio fotográfico que fundé con el nombre de “ Ojo x Ojo “ con el fin de obtener más libertad para desarrollar mis proyectos más personales, entre estos el de los cineastas españoles. Aproveché los años que estuve trabajando en el bar para ir retratando una variedad muy amplia y diferente de personajes que por allí pasaban a diario. Fue una etapa muy interesante fotográficamente hablando de la que guardo un grato recuerdo.

En la era digital aún trabajas en fotoquímica. ¿Porqué eres tan fiel a la película fotográfica?

En mi etapa de aprendizaje como fotógrafo sólo existía la fotografía analógica y la gran mayoría de los fotógrafos a los que admiro sus trabajos han sido realizados con película química. Para mi era esencial que mis primeros proyectos personales fueran realizados de esta manera. No estoy en contra de la fotografía digital, todo lo contrario me parece muy interesante y además posee muchísimas ventajas pero en el fondo ambos tipos de fotografía son sólo una herramienta de trabajo con unas características concretas que uno escoge según las necesidades del proyecto o encargo que va a emprender. Pienso que lo ideal es poder trabajar con ambos sistemas.

Llegas a un espacio desconocido para ti, con un director que quizá personalmente no lo conozcas en profundidad. ¿Cómo llegas a la fotografía esperada?

Honestamente no es tarea fácil, depende de muchos factores. Pienso que es muy importante crear un ambiente relajado de trabajo durante la sesión fotográfica, para mi es fundamental ganarme su confianza, evitar tensiones o esa sensación de que pueda sentir que hace el ridículo. Intento que el cineasta en cuestión me conceda generosamente el máximo tiempo disponible. Respecto al espacio que el mismo cineasta me propone prima ante todo la luz, preferentemente natural, allí donde está la luz pongo la cámara. A la hora de componer en formato panorámico es cierto que la características del espacio tienen mucho a decir sobre todo en función del equilibrio de la figura ( la persona ) y su posición dentro de este, pero al final es un fuerte latido de mi corazón quien me susurra que el retrato ya esta hecho aunque esta sensación no siempre se produce .

Porqué decides fotografías retratos en formato panorámico?

La elección del formato panorámico fue más accidental que premeditada. La llegada al mercado de la Hasselblad X-Pan y mi atracción especial por las cámaras telemétricas provocaron que adquiriera una de este modelo. Mi acusada preferencia por el retrato me llevo a probar este género fotográfico bajo la visión panorámica. Lo primero que me atrajo de este peculiar formato fue el tratamiento del espacio y las posibilidades que me ofrecía para fragmentarlo, la singularidad de este formato aplicado al retrato era un reto demasiado atractivo como para dejarlo correr.

¿Qué esperas de las fotografías que les haces a los directores? ¿Podemos decir que estás creando un catálogo de cineastas?

Sí, podría decirse que uno de los objetivos de este proyecto sería crear un archivo insólito sobre varias generaciones de cineastas iberoamericanos con un intencionado valor documental.

El objetivo principal de la creación de este archivo fotográfico es dar a conocer a un público plural e inquieto la existencia de una serie de cineastas que a lo largo de varias décadas han ido construyendo con sus películas la historia del cine iberoamericano. A través de la imagen llegamos de una manera mucho más ligera al conocimiento de algo., nos estimula y nos enriquece. Alimentarnos de cultura siempre es positivo y necesario.

¿Cuántos directores tienes fotografiados actualmente?

Nunca me he tomado la molestia en contarlos pero pienso que estaré por encima de los 500 cineastas.

Retrato del gran artista mallorquín, Miquel Barceló, en su estudio de París. Conocerle fue uno de esos momentos inolvidables de la experiencia de Óscar como fotógrafo.